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Estoy hasta los cojones, de todo. De este mundo de mierda, de una visión tan pesimista por tu parte, me lo has pegado, sigo simulando ser feliz y estar todo el día contenta, ¿crees que tanto teatro funciona para hacer que me lo crea? Quizás convenza a todos, pero a mi no puedo engañarme. No soy más que un daño colateral de la especie humana. Que si soy rara, que si soy diferente o gilipollas,... soy tantas cosas que por un adjetivo más no me va a dañar.
Necesito desahogarme, no ahogarme cada vez más en llantos.
Que antes funcionaba, pero ahora o llevo un bolígrafo en la mano o reviento.
Está nublado, ¿lo ves?

Quiero desaparecer. Cumplir lo que tanto deseas.

Te has ido, las promesas están muertas, ¿de verdad crees que merece la pena seguir luchando por algo que ni siquiera me convence? Te amo, y eso lo juro más veces. Pero tú a mí no, entonces, ¿cuál es tu duda?

Lo siento, pero no voy a escribir más.
Hoy, no.